Cada día debemos tomar al menos 5 raciones entre fruta y verdura al día. ¿Por qué? Porque así se garantiza obtener vitaminas, minerales, fibra dietética y agua, saciando el apetito, por lo que su consumo sustituye el de otros alimentos que aportan más calorías y menos nutrientes esenciales. Se recomiendan dos raciones de verdura al día, que puede ser en forma de ensalada (lechuga, canónigos, espinacas, tomate, cebolla, zanahoria, pepino, pimiento…) o cocinada (judías verdes, calabacín, berenjena, puerro, acelgas, espárragos, coliflor…) y tres piezas de fruta fresca de temporada al día. No lo dudes…la fruta en diversas formas, siempre es el mejor postre.